La Casa Aktion Poliphile, de Studio Granda




Huyendo del ruido del tráfico en Wiesbaden, Alemania, la familia Koening decidió cumplir su sueño de vivir junto al bosque. Para ello organizó en 1989 un concurso internacional entre jóvenes arquitectos. En la convocatoria dejaron claro que no buscaban "la casa 'más bonita del mundo', ni tampoco la casa para un astronauta, un político, un pintor, ni siquiera un escultor; sino una casa para un ciudadano ordinario."

Casa para un ciudadano ordinario
A través de la galería de arquitectura y diseño ZB de Frankfurt, la familia Koening convocó un concurso por invitación. La selección de los equipos participantes se realizó mediante el consejo de quince prestigiosos arquitectos, entre los que se encontraban Rafael Moneo, Robert Venturi, Tadao Ando, Alvin Boyarsky, Daniel Libeskind y Peter Cook. El concurso fue recibido con entusiasmo y en él participaron un total de cuarenta y dos arquitectos procedentes de quince países. Cada uno de los participantes recibió los tres documentos del concurso. El primero consistía en información urbanística, climatológica y fotográfica de Wiesbaden. El segundo fue el listado de los espacios necesarios. Básicamente éstos eran los mismos que el matrimonio y sus dos niños tenían en el viejo piso de Wiesbaden, y que ya contaba con espacio para acomodar a dos o tres huéspedes. La familia completó el programa de la casa con un tercer elemento de inspiración: la novela Hypnerotomachaia Poliphile escrita por el monje italiano Francesco Colonna en el siglo XV. Esta obra trata del amor y la pasión, aspectos de la vida sobre los que a Colonna no le estaba permitido pensar debido a su condición de monje. A través de los sueños del personaje principal - el héroe Poliphile que, errando por los bosques Harz, conoce a Delia, la diosa romana de la juventud, energía y salud - la novela se presenta como un cuento alegórico sobre la lucha entre el amor y el lado oscuro del alma humana. Sin mirar nuestras sombras no podremos comprender la realidad humana.

Las casas de Delia y de Saturno
Margrét Harðardóttir y Steve Christer, los arquitectos propuestos por el professor Peter Cook y fundadores de Studio Granda en Reykiavik, ganaron el concurso con una casa que refleja los vicios y las virtudes de todo ser humano. Su proyecto interpretaba a la diosa Delia como la imagen de la vida contemporánea, ligera y moderna. También quisieron trabajar con la representación del pasado, masivo y primario. Para ello, y aunque Saturno no aparece en la novela como personaje, introdujeron a ese dios que, según la mitología romana, representa el lado oscuro del carácter humano. Él simboliza la idea de que el tiempo crea y, entonces, destruye su creación. Así, Delia y Saturno llegaron juntos a constituir en el proyecto los símbolos de la ambigüedad de la vida.
Bajo estas premisas la vivienda quedó dividida en dos construcciones: La delicada 'Casa de Delia', que vino a ser la morada de la familia; y mucho más pequeña en escala pero más pesada, la 'Casa de Saturno' o la residencia de invitados, que fue construida con piedra.
Al acceder desde la calle, el muro de arenisca roja de la 'Casa de Saturno' proyecta una sombra sobre el visitante. Tras caminar bajo su esquina, el muro se prolonga mediante una hilera de árboles y, entonces, la intensa fragancia de las flores del jardín engrandece la acción de cruzar un puente hacia la 'Casa de Delia', a través del cual se vislumbra el bosque en la lejanía. La 'Casa de Delia' es una construcción grácil, con un exterior construido por un juego de listones de madera de cedro de grosor variable y que se retuercen suavemente. La densidad de estos listones en su fachada norte nos recuerda a Poliphile errando por los bosques alemanes como testimonio de un mundo confuso por las contradicciones de su mente.
Invariablemente, las dos casas están entrelazadas por sus sistemas de circulación. En Delia, una ruta espiral arranca desde el sótano hasta la azotea. Cuando este recorrido pasa por el porche de entrada se corta por el paseo desde la calle que ya ha franqueado la sombra de Saturno. Es como si todos debiesen pasar bajo su sombra porque, sin Saturno, Delia no existiría. Él es su antepasado y sobre su brazo tendido ella descansa ahora, delicada y ligera.
La novela "fue un recurso mágico para manipular unos requisitos muy específicos sobre una parcela extremadamente difícil", explica Studio Granda. Aunque la mayor preocupación de la familia Koening consistiese en lograr una solución práctica, los arquitectos también comprometieron a los clientes en un juego lírico a través de los personajes de Delia y Saturno. Fue así, desde la consideración de la naturaleza dual del ser humano, como se construyó una casa que bien podría ser para cualquiera de nosotros.

Pie de fotos.
a. Margrét Harðardóttir (n. 1959) y Steve Christer (n. 1960), arquitectos fundadores de Studio Granda.
b. Un grabado del libro muestra al héroe Poliphile deambulando por el bosque de las emociones.
c. Casa de Delia: a- Estar, b- Comedor, c- Cocina, d- Entrada, e- Guardarropía, f- Aseo, g- Escaleras al jardín, h- Hueco, i- Chimenea, j- Trampilla para la ropa sucia, k- Armario de instalaciones, l- Terraza, m- Estatua de Jano. Casa de Saturno: n- Estudio, o- Biblioteca, p- Baño.
d. La casa Aktion Poliphile consiste en la 'Casa de Delia' y la 'Casa de Saturno'.
e. En Delia, una ruta espiral arranca desde el sótano hasta la azotea; un lugar privado donde la familia Koening disfruta de la vista del paisaje y el cielo.
f. Al acceder desde la calle, el muro de arenisca roja de la 'Casa de Saturno' proyecta una sombra sobre el visitante.